ARYZ A LA BASILICA DEL PI
CRIANZA, ARYZ
INICIATIVA: BASÍLICA SANTA MARIA DEL PI
CURADORIA: B-MURALS
PRODUCCIÓN Y REALIZACIÓN: ARYZ ESTUDIO
El ámbito de la Iglesia y el arte urbano contemporáneo son dos mundos que, hasta ahora en la ciudad condal, difícilmente se encontraban.
Nuestras iglesias se erigen como monumentos históricos, sagrados, catalizadores de piezas de arte de una increíble riqueza. Se perciben como edificios-refugios, poco permeables al trajín urbano que les rodea. Mientras en sus entrañas duermen tesoros artísticos, los autores urbanos recorren las calles adyacentes para dejar su huella. Estos mundos paralelos no entrelazaron sus trayectorias, hasta que la firma de un escritor desconocido acabó por dañar un escudo policromado de la fachada lateral de la Basílica Santa Maria del Pi, desencadenando una colisión mediática en abril de 2022.
A raíz de un primer contacto entre la Basilica Santa Maria del Pi y B-Murals, se fundamentan las bases de un proyecto artístico rompedor, que contribuye a tender puentes entre los mundos eclesiástico y del arte urbano, conectando sus pulsiones artísticas y sociales.
Desde el punto de vista de B-Murals, el artista que mejor podría abordar y desarrollar esta propuesta, era, sin duda, Octavi Arrizabalaga, reconocido internacionalmente como ARYZ: pionero en los murales de gran formato, con obra relevante a nivel internacional e importante trayectoria de instalaciones para espacios singulares.
Aryz llevó el arte urbano de la Barcelona de los 2000 a otro nivel; en sus inicios, empujó su obra en el contexto urbano más allá de los límites transitados, antes de profundizar en su trabajo de estudio. Estos dos ámbitos le valieron un reconocimiento y una proyección mundial; con varias exposiciones individuales y piezas murales en las calles de Marruecos, Japón, Francia, Reino Unido, Finlandia, Dinamarca, Polonia, China, Madagascar, Estados Unidos, Ucrania o Venezuela entre otros países.
The field of the Church and contemporary urban art are two worlds that, until now in the city of Barcelona, hardly met.
Our churches stand as historical, sacred monuments, catalysts of incredibly rich pieces of art. They are perceived as refuge buildings, not very permeable to the urban bustle that surrounds them. While in their entrails slumber art treasures, urban writers roam the adjacent streets to leave their mark. These parallel worlds did not intertwine their trajectories, until the signature of an unknown writer ended up damaging a polychrome coat of arms on the side façade of the Basilica Santa Maria del Pi, triggering a media collision in April 2022.
As a result of an initial contact between the Basilica Santa Maria del Pi and B-Murals, the foundations were laid for a groundbreaking artistic project that helps to build bridges between the ecclesiastical and urban art worlds, connecting their artistic and social impulses.
From the point of view of B-Murals, the artist who could best tackle and develop this proposal was, without a doubt, Octavi Arrizabalaga, internationally recognised as ARYZ: a pioneer in large format murals, with relevant work on an international level and an important trajectory of installations for singular spaces.
Aryz took the urban art of Barcelona in the 2000's to another level; in his early days, he pushed his work in the urban context beyond the set boundaries, before delving deeper into his studio work. These two areas earned him worldwide recognition and projection; with several solo exhibitions and mural pieces in the streets of Morocco, Japan, France, United Kingdom, Finland, Denmark, Poland, China, Madagascar, United States, Ukraine or Venezuela among other countries.
El artista colaboró con la Basílica y B-Murals durante varios meses con la espiritualidad y el espacio sagrado como telón de fondo. El objeto de la intervención, de dimensiones sin precedentes en Barcelona, se desveló el pasado 14 de julio en la tarde-noche en la Basílica del Pi.
La ceremonia fue acompañada por la música en vivo de Raul Refree y Adriano Galante, en una colaboración mezclando la tradición del órgano, la voz y la música experimental. En este equilibrio entre mezcla de influencias y géneros se transcendieron las fronteras entre lo sagrado y lo experimental, lo físico y la espiritualidad.
The artist has been collaborating with the basilica and B-Murals for several months with the concepts of spirituality and the sacred space as a backdrop. The object of this intervention, a hybrid of mural painting and studio work of unprecedented dimensions in Barcelona, will be unveiled on July 14 in the evening at the Basilica del Pi.
The ceremony was accompanied by the live music of Raul Refree and Adriano Galante, in a collaboration blending the tradition of organ, voice and experimental music. In this balance of mixed influences and genres, the boundaries between the sacred and the experimental, the physical and the spiritual were transcended.
La obra creada para la Basílica del Pi, establece un diálogo entre el arte urbano y el espacio sagrado, promoviendo la reinterpretación del hecho humano y espiritual a partir del arte contemporáneo más reciente y transgresor. Esta propuesta supone un ejemplo fundamental del que el arte urbano pose sobre la mesa: buscar la reflexión y la sorpresa, haciendo aflorar realidades imposibles en entornos inesperados.
Crianza, de Aryz: instalación-pintura, que interpreta la maternidad, o piedad a partir de la figura de una mujer con un niño en brazos. Aunque la intervención pueda tener diferentes lecturas y posibles ambigüedades, son estas que conducen al mismo postulado: la representación del amor como un valor universal, la generosidad, el altruismo, la alteridad, la amistad, la protección y abrazar el otro. Valores compartidos con la Basílica del Pi, que se posiciona como un espacio abierto a la espiritualidad transversal, anónima, tradicional y contemporánea, pero esencialmente Humana.
The work created for the Basílica del Pi, establishes a dialogue between urban art and the sacred space, seeking a reinterpretation of the human and spiritual reality based on the most recent and transgressive contemporary art. This proposal is a fundamental example of what urban art is all about: seeking reflection and surprise, allowing impossible realities to emerge in unexpected environments.
Crianza, by Aryz, is an installation and painting that portrays motherhood, or Pietà, through the representation of a woman with a child in her arms. Although the intervention may have different readings and possible ambiguities, they lead to the same premise: the representation of love as a universal value, generosity, altruism, otherness, friendship, protection, embracing the Other. Values that the Basilica del Pi shares, as a space open to transversal spirituality, anonymous, traditional or contemporary, but essentially Human.
En el lugar que ahora ocupa Crianza, ha existido anteriormente un retablo desaparecido en 1714, del cual ha sobrevivido la pequeña escultura de la virgen que todavía preside en la Basílica.
A través de Crianza, se recupera y reinterpreta el antiguo dialogo entre la virgen y un retablo desaparecido, construyendo así nuevos puentes entre el antiguo y el contemporáneo. Pero este diálogo, esta relación entre piezas va más allá que los significados temporales: el simbolismo del origen de esta instalación nos lleva a reflexionar sobre aspectos de nuestra sociedad. El lugar que ocupa la iglesia, y su voluntad en actualizarse y conectarse con el momento actual; el arte urbano que suerte de los suburbios, y se combate con el mundo de la imagen mainstream por su carisma y capacidad de dialogar de forma directa con el espacio público.
Los contrastes entre el ámbito religioso y el arte urbano acaban por unirse en el espacio periférico y marginalizado, con sus constantes luchas y oscilaciones por ocupar el centro de nuestras vidas, y ser empujado para fuera de ellas. Con Crianza esa marginalidad y lucha se encuentra y unifica como un aspecto común: se materializa en los colores, tela, y hierro de una obra de arte, sublime, etérea y al mismo tiempo resistente y gràvida, impactante bajo la sensibilidad de cualquiera.
On the place now occupied by Crianza, there was an altarpiece that disappeared in 1714, from which only the small sculpture of the virgin has survived, still curently presiding the Basilica.
Through Crianza, the old dialogue between the virgin and a disappeared altarpiece is recovered and reinterpreted, thus building new bridges between the old and the contemporary. But this dialogue, this relationship between pieces goes beyond temporal meanings: the symbolism of the origin found in this installation leads us to reflect on aspects of our society. The place of the church, and its willingness to update and connect with the present moment; the urban art that comes from the suburbs, and fights with the world of the mainstream image for its charisma and capacity to dialogue directly with the public space.
The contrasts between the religious sphere and urban art end up coming together in the peripheral and marginalised space, with its constant struggles and oscillations to occupy the centre of our lives, and to be pushed out of them. With Crianza that marginality and struggle is found and unified as a common aspect, materialized in the colours, fabric, and iron of a work of art, sublime, ethereal and at the same time resistant and powerful, striking to anyone's sensibility.
El impacto mediático de la obra ha sido sin precedentes en la ciudad condal.
Con Crianza se ha dado un paso en la larga historia entre el arte y la Iglesia. Por primera vez, una pieza de arte contemporáneo entra en el altar de una basilica consagrada en la ciudad, ocupando su altar.
Queremos agradecer el prodigioso trabajo de Aryz - su generosidad en apostar desde su estudio en la producción y creación integral de la obra; la genialidad y brillante apuesta de la Basílica del Pi de convidar a entrar el arte contemporáneo a su retábulo.
Estamos emocionades de haber podido conectar a estos dos agentes culturales de primer orden, aportando nuestra visión curatorial a este proyecto único.
The media impact has been unprecedented in Barcelona.
With Crianza, a step has been taken in the long history between art and the Church. For the first time, a piece of contemporary art enters the altar of a consecrated basilica in the city, sitting on its altar.
We would like to thank the prodigious work of Aryz - his generosity in committing to the production and integral creation of the work with his studio; the genius and brilliant commitment of the Basilica del Pi in inviting contemporary art to enter and occupy the space of its altarpiece.
We are thrilled to have been able to connect these two cultural agents of the first order, contributing our curatorial vision to this unique project.