Noé Peiró

Como es muy habitual en la gente que dedica hoy en día su vida al arte, Noé Peiró también empezó mostrando interés al dibujo desde muy pequeño. Pasó su adolescencia pintando en la calle hasta llegar a su meta: estudiar bellas artes, donde su pintura dió muchas vueltas pero siempre enfocada al encanto del objeto cotidiano. Más tarde estudió educación donde encontró su vocación.

Los temas en los que ha ido trabajando han ido evolucionando en relación al objeto, pero no su estilo, siempre enmarcado en la ilustración. Hoy en día su trabajo gira entorno a los juguetes y a estrecha relación con la infancia; inquietud sobre la que pinta y lee gracias a la curiosidad que le despertaron sus estudios en educación.

En sus ilustraciones podemos ver imágenes de niñxs o de cualquier objeto relacionado con ellxs y como intenta principalmente transmitir su interés por el acto de jugar y su anhelo de la infancia. Debido a estas preocupaciones siempre trata el tema desde diferentes puntos: el aspecto físico de los juguetes debido a su industrialización; los roles de género que lo rodean; el coleccionismo de juguetes en personas adultas; el objeto transicional; o del impacto de los juguetes en los procesos formativos de lo cognitivo a una edad temprana, entre muchos otros.

Este último punto es el que enmarca su mayor preocupación debido a su valor en la formación de nuestro yo, ya que el juguete posee un fuerte componente simbólico que permite a los niños el desarrollo de su imaginación; componente fundamental en su desarrollo y construcción personal.

A partir de 2020 ha ido participando en diferentes festivales de arte urbano, compaginándolo siempre con el trabajo de estudio y las exposiciones, aunque el trabajo urbano, el arte mural, es lo que más le llena por la interacción inmediata con la gente y su proceso de creación.

Noé Peiró ha sido uno de los 8 artistas seleccionados por convocatoria abierta para pintar las intervenciones murales en el espacio de la Nau Bostik el año 2024.

INSTAGRAM

Joan B-Murals